lunes, 9 de junio de 2008

Resumen de un viaje

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Creo que ya he contado todo lo relativo a mi estancia en el Líbano de este año, aún así, y ya desde la distancia, voy a hacer un pequeño resumen, ya sin detalles del día, un poco contar lo que ha significado.

El viaje como tal, fue bueno, tanto el de ida como el de vuelta, salvo que en el último momento me cambiaron la puerta de embarque y casi me quedo entierra… está claro que en esto de viajar no puede uno bajar la guardia, y ha de estar alerta en todo momento, incluso cuando cree que ya está todo más que claro.

A los dos días de llegar quise ver las calles que había conocido antes, las que vi por última vez hace dos años, aquellas calles de la parte sur de Beirut donde apenas 2 días después de volver empezó la Guerra con Israel. Calles destrozadas, edificios que conocía perfectamente, están ahora en el suelo, algunos descombrados, otros, en construcción, los menos ya terminados de construir, hay una calle, donde no ha quedado ni un edificio en píe.

Mis salidas han sido por las mañanas, en solitario, pasear, a la consulta de mi hija, al caber desde donde os contaba que estaba suponiendo mi viaje allá… y donde me encontré con alguno de vosotros, y por casualidad con mía, cosa que me produjo mucha alegría, me encontré también con un simpático argentino que vino a saludarme, y alguna que otra anécdota más que ya he contado. Salidas al sur a comer, salidas a alguna invitación o visita puntual, a la Lonja a comprar pescado, un pescado increíble que compras aún vivo, una salida a pescar, bueno, casi más a pasear que a pescar la verdad, pero que sirvió al menos para “Matar el gusanillo”…

A los pocos días de llegar, Huelga General con corte de carreteras, y cierre del acceso al aeropuerto, lo que parecía que sería solo una huelga, se transformó en un verdadero enfrentamiento entre los diferentes Partidos Políticos, que como ya comenté, están todos armados, a excepción de una parte de los Cristianos. Tiros por todas partes, más en la zona centro, en Alay, Aramunt y Trípoli, en donde hubo más de un centenar de muertos, en la zona donde yo vivía las cosas estaban tranquilas, y aún así, pasamos varios días sin salir a la calle. A los 7 días, los Partidos Políticos llegaron a un acuerdo, posiblemente presionados por la oposición, que son los que más armamento tienen, cada Partido tiene su Sede, cada Sede tiene armas para dar y tomar, los combatientes, lo son la mayoría por cuestiones religiosas o políticas, o ambas, y otros, los menos, a sueldo.

No pasé miedo ni es tuve intranquilo, mi hija se encargaba de ello insistiéndome en que no pasaba nada, y los problemas eran en otra zona…

Interesantes las mujeres, de lo más variadas, las hay que llevan velo y también que andan con minifalda, con jeans muy ajustados, y las menos, talibanas. De todas las que he conocido o me he cruzado, me llamó la atención una negra de ojos grandes y negros, 1,70 y cintura de avispa, diría que de medidas perfectas, seguro que esos míticos 90-60-90, y también una preciosa rubia de ojos verdes enormes que estaba de dependienta en uno Súper… Mi hija me presentaba a algunas amigas, y estas, al saber que era viudo, preguntaban sorprendidas que por qué no me casaba… todas decían los mismo, está claro que allí un viudo tiene muchísimas posibilidades de éxito… lo malo es que hay que dar casi como norma una dote de entrada, vamos, que casi parece una fianza más que una dote… y vete tu a saber si después de pillar los 50,000 $ dicen que uno no es de su agrado y te quedas compuesto y sin novia…bueno, después del desembolso, descompuesto más bien, así, que mejor no intentarlo.

Un día en el ascensor, subió una vecina de mi hija y me dijo lo mismo, que por qué no me casaba, le dije por señas, juntando los dedos índices, y después señalándola a ella… -Pues contigo estaría bien – se sonrió, se sonrojó, y miró para otro lado, y luego mi hija me riñó diciendo que por que le había dicho eso, que estaba casada…

He de decir que estoy realmente contento con este viaje, que he sacado una muy buena conclusión, cuando aquí en España veía los problemas de allí me inquietaba mucho, por más que mi hija se empeñase en decirme que no era esa la realidad de su zona, y que ellos se sentían suficientemente tranquilos, no llegaba a creerla… quizás ahora después de haber vivido esta experiencia con ellos, sea capaz de ser más objetivo, y llegar a entenderla cuando me dice que esté tranquilo, que las cosas se viven diferentes desde lejos que cuando se viven en primera persona, que las zonas difieren mucho unas de otras… desde luego, el que no se conforma, es por que no quiere.

Pero… que tranquilo me siento en España, que seguro, que fácil me resulta salir a la calle, que fácil ”entendernos”, que tranquilo me deja salir y saber, que puedo pedir sin “calentarme la cabeza” un café, y que puedo pasar a comprar sin tener que andar con señas…

Un abrazo a todos.

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1 comentario:

mia dijo...

Me alegra que la valoración global de tu viaje sea así de positiva, y, por cierto, espero que "El Gusanillo" de CONTAR arraigase suficientemente en ti, y continúes en el mundo blog... :)